Desde hace más de un siglo, la migración de mexicanos a Estados Unidos ha sido constante y casi siempre creciente. Tan sólo en el estado de California, Texas, Illinois y Arizona se estima que habitan más de 10 millones de mexicanos. Desde la taquera de la esquina hasta el ganador de Óscares, los mexicanos aportan mucho a la cultura y la economía de nuestro vecino del norte. Por lo tanto, una situación que no pasará por la cabeza de muchos y sin embargo resulta de lo más normal es que un mexicano en Estados Unidos decida vender su casa en México.
Las razones de esta decisión pueden ser muchas, tal vez busques adquirir una nueva casa con el vecino del norte, quizás tu familia se había quedado en México y ahora está lista para alcanzarte. La distancia ciertamente presenta sus desafíos, sus variantes a lo que implicaría vender si resides dentro del propio país. Y sí, el proceso tiene sus propios pormenores, pero no te preocupes, en esta nueva entrada de nuestro blog te compartimos los consejos clave facilitarte lo que te espera y para llevar la venta a buen puerto.
Busca al mejor agente inmobiliario
En algunas ocasiones, cuando la gente vende su casa en su propia ciudad, toma el riesgo de hacerlo sin agente inmobiliario. Esto sería una insensatez si quieres vender tu casa en México desde Estados Unidos. En este caso, la compañía de un especialista confiable, con buena actitud y mucha experiencia será de gran ayuda para agilizar el proceso, tener un aliado al otro lado de la frontera y lograr el proceso de la forma más eficiente posible. Esta búsqueda pudiera volverse exhaustiva, pues existen un sinfin de opciones, pero puedes ahorrarte ese proceso e ir directamente con la inmobiliaria que combina lo mejor de la sabiduría adquirida con décadas de trabajo y lo último en tecnología para el sector de bienes raíces.
Arregla y detalla esa propiedad
Si ya te las arreglaste para tener un terreno y construir una casa, te conviene pensar detenidamente en esas inversiones que se pueden multiplicar en ganancias. Tal vez se trate de un gasto menor, arreglar una humedad, pintar la fachada o una habitación. O quizás tienes más ahorros guardados y puedes, por ejemplo, construir otra habitación y otro baño en el segundo o tercer piso. Sólo recuerda que las primeras impresiones tienen un gran impacto en las mentes de los compradores, habrá un instinto de comienzo que les dirá si es la propiedad con la que estaban fantaseando o no.
Define un precio adecuado para el mercado
Pasea por la zona y llama a todos los anuncios que te encuentres para establecer un precio con base en la mayor información posible. Luego navega las páginas que venden propiedades en tu zona y haz comparaciones que te permitan establecer un precio conveniente para ti y atractivo para los posibles compradores. ¿Cuánto varían los costos por ese baño extra? ¿Cuánto más se paga por ese roof garden o ese jardín? Este paso, al igual que los demás que damos en estas condiciones, podrán llevarse de forma más amable y eficaz con el acompañamiento de nuestro agente inmobiliario de confianza.
Anuncia tu propiedad virtual y presencialmente
Si tu casa o departamento ya están listos para mostrarse, si ya decidiste un precio justo para ti y llamativo para compradores, llegó el momento de anunciar a toda esa gente buscando en invertir que tu propiedad se encuentra disponible. Una vez más, contar con una agente en la ciudad te ahorrará muchos gastos y otras complicaciones. Él o ella serán los encargados de imprimir un anuncio vistoso para todas las personas que andan merodeando la zona en busca su nuevo hogar y atender a quienes busquen más información. Además, las mejores inmobiliarias cuentan con agentes que sabrán posicionar tu propiedad en los canales de internet de México y Estados Unidos, asegurándose de que lleguen al mercado que busca lo que ofreces.
Ten en cuenta las cuestiones fiscales
Ya hemos hablado anteriormente sobre los impuestos que se deben pagar para vender una propiedad en México e incluso compartido un tip para evitar el ISR. La situación cuando la transacción desde el país del norte puede tener otras complicaciones que cambia según distintas variables. Además de preguntar a tu agente inmobiliario, te recomendamos que te asesores con un notario, un contador o cualquier persona dedicada a asuntos fiscales que tenga conocimiento de estos casos específicos.
Ten listos tus documentos
Si quieres evitar momento de estrés y someterte a los frustrantes y muchas veces tardados procesos de las burocracias, te recomendamos revisar con antelación que cuentes con todos los documentos necesarios para vender tu propiedad. Es decir, de entrada necesitarás lo mismo que si fueras a venderla como residente en México: título de propiedad, certificado de libertad de gravamen, comprobante de pagos de predial y agua, acta de nacimiento, identificación oficial, etc. Algunos casos específicos, por ejemplo, si una propiedad fue heredada y sigue al nombre del difunto, pueden requerir otros papeles. En este caso, la clave será importante otorgar un poder notarial a nombre de un representante legal que puede ser un familiar o el propio agente.
Considera la opción de vender a través de un fideicomiso
Si eres un paisano que no residen en el país es posible que debas considerar la venta de tu propiedad a través de un fideicomiso, es decir, un acuerdo legal en el que un tercero, conocido como el fiduciario, tiene el control de la propiedad y actúa en tu nombre. Esto puede ser necesario debido a las leyes mexicanas que restringen ciertas transacciones. Pero no te preocupes, en este caso tu agente también sabrá llevar el caso a un abogado que deje todos los papeles en regla para realizar la transacción.
En resumidas cuentas, todo lo que necesitas para vender tu casa en México desde Estados Unidos son unos pocos papeles más y el acompañamiento de los profesionales del mundo inmobiliario. Ahora que ya lo sabes, que nada te detenga.