Icono de la revolución industrial, inventor con más de 160 patentes, uno de los primeros empresarios en desarrollar la producción en serie, el Modelo T fue el primer auto producido en masa, catapultó la industria automotriz y transformó el mundo. Igual que lo hiciera el iPhone 100 años más tarde con las telecomunicaciones y el internet. Si hiciéramos una comparación de los empresarios, inventores y líderes que cambiaron el rumbo de la historia, podríamos decir que Henry Ford es un personaje de la talla de Steve Jobs, con 100 años de distancia entre ellos.